Paul McCartney

Paul McCartney estremece Guadalajara

MÚSICA

Con un «Qué onda Guanatos»Paul McCartney se echo a la bolsa a 34 mil asistentes en el estadio omnilife el pasado sábado 5 de mayo.

Paul McCartney estremeció a los 34 mil asistentes al estadio omnilife de la ciudad de Guadalajara, en lo que fue el primero de los 3 conciertos que ofrecerá en México con su gira On the run.

McCartney logró en casi 3 horas de concierto llevar a tope las emociones de los tapatíos; gente que lloraba, reía, saltaba, gritaba, se inclinaba y hacía alabanzas al Sir inglés fue deleitada con un impresionante setlist de 42 canciones, que recorrieron la discografía de The Beatles, Wings y sus éxitos como solista.

Desde tempranas horas la gente se congregaba a las afueras del omnilife, vistiendo playeras de The Beatles, de McCartney, ataviados con la bandera Británica o algunos más atrevidos vistiendo a la usanza del Sargent Peppers en su versión mexicana.

Dentro del estadio la expectativa crecía conforme fueron avanzando las horas, la gente caminaba de un lado a otro, se tomaba fotos con el escenario de fondo, buscaba a los amigos, llamaba por teléfono para informar que estaba ahí y esperaba la llegada de una de las leyendas vivas más importantes de lo que llamamos Rock & Roll.

La espera era amenizada por un DJ que mezcló algunos de los temas emblemáticos donde ha participado el ex Beatle. Luego, en punto de las 9 de la noche, como marcaba el boleto de entrada, las luces de estadio se apagaron por completo para que las pantallas que estaban al costado mostraran un collage de fotos y vídeos de McCartney acompañados de música. La muestra audiovisual llevó más tiempo de lo esperado, después de 25 minutos se apagaron las pantallas y el escenario estaba listo para recibir en punto de las 9:28 al músico inglés.

Paul subió al escenario y con expresión de sorpresa y entusiasmo miraba a la gente en el estadio mientras éstos se rendían ante él; Magical Mystery Tour fue la primera canción que hizo cimbrar el estadio y a sus asistentes, después de enlazarse con Junior´s Farm, McCartney saludó al público con un «Como está Guadalajara», seguido de un «Qué onda Guanatos», en un español que se esforzó en leer durante buena parte del concierto.

Los éxitos de The Beatles, Wings y McCartney sonaban y eran coreados por un público entregado al músico inglés, que entre canción y canción se divertía haciendo muecas, gestos, malabares con sus instrumentos, posando para las fotos o arrojando frases en español e inglés que arrancaban las risas y entusiasmo de los tapatíos.

El ex Beatle fue arropado por músicos de gran calidad y carisma, entre los cuales sobresalió su baterista, que con bailes coreografiados y una actitud desinhibida y auténtica hacía el deleite no solo en sentido musical sino también artístico; su banda de apoyo resultó un deleite adicional para el oído de los asistentes.

La velada avanzaba y la música seguía siendo el incentivo para disfrutar del espectáculo lunar que acompañó a McCartney en Guadalajara, la luna parecía haberse puesto de acuerdo para fungir como un plus en el de por sí ya majestuoso escenario.

Los momentos emotivos estuvieron siempre presentes, pero lo fueron aún más cuando Paul dedicó My Valentine a su ya fallecida esposa Linda McCartney.

Pero ahí no terminaron los emotivos recuerdos, Paul recordó al que llamó su hermano, John Lennon dedicándole Here Today, canción escrita en memoria de él, asimismo McCartney ofreció un homenaje  a su también extinto y querido amigo George Harrison con la canción Something.

Las sorpresas seguían en una noche que parecía que no terminaría, (nadie quería que terminara), Paul, anuncio una sorpresa previo a entonar Obladi obla da, que resultó ser el acompañamiento con mariachi, que termino de estremecer a las 34 mil almas reunidas en el omnilife.

Uno de los momentos más impactantes llegó con la emblemática Live and let die, donde la pirotecnia hizo aparición y causo aun más euforia en los asistentes que sorprendidos vibraban al ritmo de la música.

Después de Hey Jude, McCartney abandona momentáneamente el escenario, y mientras su nombre es coreado y se hace la ola, aparece con una bandera mexicana en las manos, llevándose los gritos y palmas de todos los asistentes que corearon al unisono el grito de México y Paul.

El primer encore arrancó con Lady Madonna en el que se proyectaron imágenes de mujeres sobresalientes de la historia, entre ellas haciendo un homenaje a Frida Kahlo. Después tocaron Day tripper y Get Back para abandonar de nueva cuenta el escenario.

El segundo y último encore trajo consigo a una de las canciones más esperadas de la noche, Yesterday, que fue coreada por un público entregado al máximo; y después de 3 canciones más, llegó The End, el colofón de una noche que difícilmente se olvidará en Guanatos y entre los 34 mil que fueron testigos de la noche en que una leyenda de lo que llamamos Rock & Roll estremeció suelo tapatío.

Paul McCartney sale del escenario con un «Adiós Guadalajara, nos vemos a la próxima»  lo que abre  la esperanza de que la vida nos dé la oportunidad de vivir un día igual o mejor que este.

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